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El papel fundamental de las bibliotecas públicas en el apoyo al desarrollo económico local

Brophy, Julie. “Public Libraries Highlight Business Support at ‘Main Street Now’ Conference.” Public Libraries Online, April 22, 2025. https://publiclibrariesonline.org/2025/04/public-libraries-highlight-business-support-at-main-street-now-conference/

Las bibliotecas contribuyen a fortalecer las economías comunitarias mediante el apoyo a pequeños negocios y emprendedores. Un hallazgo relevante de esta conferencia fue el desconocimiento generalizado sobre la variedad de servicios que las bibliotecas ya ofrecen en este ámbito, lo que subraya la necesidad de visibilizar estas capacidades y fomentar alianzas con organismos locales de desarrollo económico.

En primer lugar, el artículo señala que las bibliotecas ofrecen diversos programas y servicios que pueden ir desde talleres básicos sobre el uso de bases de datos hasta charlas especializadas dirigidas por expertos en temas empresariales. Estas actividades, que pueden adaptarse según la capacidad de cada biblioteca, son solo una parte del apoyo que se brinda. Además, otros servicios como notarías, expedición de pasaportes o asistencia social también pueden ser de gran utilidad para emprendedores, pero muchas veces no se comunican de manera efectiva a quienes podrían beneficiarse. Por ello, es importante promover activamente todas estas ofertas para que los empresarios conozcan el valor que las bibliotecas pueden aportar.

Otro aspecto fundamental es la provisión de espacios accesibles para trabajar y reunirse, especialmente en comunidades con necesidades económicas. Las bibliotecas se posicionan como uno de los pocos lugares públicos donde las personas pueden trabajar sin ningún coste asociado, algo especialmente valioso para quienes inician un negocio o trabajan de forma independiente. La disponibilidad de salas de reuniones o mesas abiertas convierte a estos espacios en lugares de co-working gratuitos, facilitando la concentración y la productividad de sus usuarios.

Además, las bibliotecas ponen a disposición bases de datos y recursos digitales esenciales para los negocios, como Reference Solutions, que ayuda a identificar clientes potenciales, o LinkedIn Learning, que ofrece cursos en línea sobre marketing, ventas, finanzas y gestión. Asimismo, muchas bibliotecas cuentan con un “Library of Things”, donde se prestan objetos como kits de cámara con trípode y luces, que pueden ser herramientas clave para el marketing de productos o servicios, ayudando a los emprendedores a reducir costes iniciales y acceder a materiales profesionales sin inversión directa.

En el ámbito tecnológico, las bibliotecas proveen acceso gratuito a internet de alta velocidad, computadoras, impresoras y dispositivos prestables como hotspots o Chromebooks, facilitando la inclusión digital y superando barreras para los nuevos empresarios. Igualmente, ofrecen espacios con tecnologías innovadoras como makerspaces e impresoras 3D, que permiten a los emprendedores diseñar y probar prototipos. Esto convierte a las bibliotecas en lugares ideales para el desarrollo de habilidades digitales y la experimentación tecnológica, aspectos fundamentales en la economía moderna.

Finalmente, las bibliotecas funcionan como centros de conexión y colaboración, donde los pequeños empresarios pueden reunirse para compartir experiencias, generar redes de apoyo y participar en actividades como noches de networking, mentorías o programas como 1 Million Cups. Estas iniciativas fomentan un ecosistema empresarial más cohesionado y apoyado desde la comunidad.

El artículo concluye recomendando que las bibliotecas, independientemente de su tamaño, comiencen por identificar y promover los recursos que ya ofrecen y ajusten la forma en que los presentan para hacerlos más atractivos a los negocios. También enfatiza la importancia de establecer relaciones con organizaciones locales dedicadas al desarrollo económico para integrar los servicios bibliotecarios en la oferta comunitaria. Para apoyar esta labor, la ALA pone a disposición herramientas como Libraries Build Business Communications Toolkit, que facilita la comunicación con los actores clave del mundo empresarial. En suma, el texto subraya que las bibliotecas públicas son actores fundamentales para el desarrollo económico local y deben posicionarse activamente para cumplir esta función.

Espacios coworking y bibliotecas

Las bibliotecas están innovando para incluir servicios de coworking. Estos espacios no solo resguardan colecciones bibliográficas sino que también se convierten en lugares para la creatividad, el trabajo colaborativo y la autoformación. Las bibliotecas como tercer espacio son idóneas para el trabajo y pueden ofrecer servicios adicionales como mentores expertos, clases y recursos físicos y digitales.

Los espacios de coworking están diseñados específicamente para fomentar la colaboración y la interacción entre emprendedores y profesionales. Se trata de un espacio con tecnología moderna para ayudar al estudio o el trabajo y es un ambiente que les ayudará a concentrarse y ser productivo.

La historia de los espacios de coworking se remonta a 1995 en Berlín, Alemania, con la apertura de c-base, una asociación sin fines de lucro originalmente diseñada como un lugar para que los hackers se reunieran, colaboraran y compartieran ideas. En el mismo año, el diseñador de juegos estadounidense Bernard DeKoven acuñó el término «coworking» para describir la idea de personas de diferentes orígenes trabajando en un entorno compartido. Posteriormente, se abrieron espacios de hackers en Santa Clara, San Francisco y Brooklyn, y los seminarios y eventos sociales se convirtieron en eventos regulares en algunos de estos espacios.

Algunos de los beneficios de los espacios de coworking incluyen la oportunidad de establecer redes y colaborar con personas afines, la disponibilidad de salas de reuniones y espacios privados, la provisión de instalaciones modernas y funcionales, la accesibilidad y flexibilidad de horarios, y el ambiente relajado y propicio para la concentración. Estos espacios están diseñados para proporcionar un equilibrio entre el bullicio de una cafetería y la tranquilidad de una biblioteca, creando un entorno cómodo y eficiente para trabajar y estudiar.

Los espacios de coworking se están convirtiendo en un elemento básico del mundo laboral actual, ya que las personas y empresas cada vez valoran más el trabajo colaborativo y el aprendizaje, el sentido de comunidad, la tecnología y la sostenibilidad. Se están haciendo populares entre trabajadores autónomos, trabajadores remotos, emprendedores, propietarios de pequeñas empresas, nómadas digitales, jóvenes profesionales y estudiantes. Son un espacio deseado para estudiar y trabajar, ya que es una alternativa al espacio tradicional de trabajo desde casa. Atraen a personas con ideas afines, lo que crea un entorno positivo para trabajar, estudiar y establecer contactos.

La instalación de un espacio de coworking en una biblioteca puede ofrecer una serie de beneficios tanto para la comunidad como para la propia biblioteca. Aquí hay algunas razones por las que podría ser una buena idea:

  1. Ampliación de servicios: Incorporar un espacio de coworking amplía los servicios que la biblioteca puede ofrecer a la comunidad. Además de ser un lugar para acceder a recursos impresos y digitales, la biblioteca también se convierte en un espacio para trabajar, colaborar y conectar con otros profesionales.
  2. Atracción de nuevos usuarios: Los espacios de coworking son populares entre una amplia gama de personas, incluidos trabajadores autónomos, emprendedores, estudiantes y profesionales independientes. Al ofrecer un espacio de coworking, la biblioteca puede atraer a nuevos usuarios que de otra manera podrían no haber utilizado sus servicios.
  3. Fomento de la innovación y la colaboración: El ambiente de colaboración y creatividad de un espacio de coworking puede fomentar la innovación y el intercambio de ideas entre los usuarios. Esto puede llevar a la creación de nuevos proyectos, empresas emergentes y colaboraciones entre individuos y organizaciones.
  4. Utilización de recursos existentes: Las bibliotecas ya cuentan con infraestructura y personal capacitado para ofrecer servicios a la comunidad. Al utilizar estos recursos existentes para establecer un espacio de coworking, la biblioteca puede maximizar su impacto y eficiencia sin necesidad de inversiones significativas adicionales.
  5. Promoción de la biblioteca como un centro comunitario: La instalación de un espacio de coworking puede ayudar a posicionar a la biblioteca como un centro comunitario dinámico y relevante. Esto puede fortalecer la conexión entre la biblioteca y la comunidad, aumentando su relevancia y su apoyo público.

La planificación y diseño de un espacio de coworking requiere considerar varios aspectos para crear un entorno funcional, atractivo y adecuado para las necesidades de los usuarios. En primer lugar, es crucial realizar una investigación exhaustiva del mercado para comprender las necesidades y preferencias de los usuarios potenciales. Esta investigación proporciona información valiosa sobre la demanda del mercado y ayuda a identificar la audiencia objetivo del espacio de coworking.

Una vez que se han definido los objetivos del espacio y se ha identificado la audiencia objetivo, se procede al diseño físico del espacio. Este diseño debe ser flexible y adaptable para acomodar una variedad de actividades y necesidades de los usuarios. Se pueden incluir áreas abiertas de trabajo, salas de reuniones, zonas de descanso, áreas de colaboración y espacios privados para llamadas o reuniones.

La infraestructura y el equipamiento son aspectos fundamentales del diseño del espacio de coworking. Es importante asegurarse de contar con la infraestructura necesaria, como conexiones de internet de alta velocidad, tomas de corriente suficientes, equipos de impresión y escaneo, y mobiliario ergonómico y confortable. La tecnología también desempeña un papel importante, con la integración de pantallas de proyección, pizarras electrónicas y sistemas de reservas de salas.

El diseño interior y el ambiente del espacio son aspectos clave para crear un entorno acogedor y productivo. El diseño interior debe ser atractivo y funcional, con colores y materiales que promuevan la concentración y la creatividad. Además, se pueden incorporar elementos decorativos, plantas, iluminación adecuada y música ambiental discreta para crear un ambiente positivo y motivador.

Por último, es importante cumplir con todas las normativas y regulaciones locales relacionadas con la seguridad, accesibilidad, zonificación y licencias comerciales. Además, se debe desarrollar una estrategia de promoción y marketing para atraer a usuarios potenciales y dar a conocer el espacio de coworking en la comunidad. Esto puede incluir la creación de un sitio web, redes sociales, eventos de lanzamiento y colaboraciones con organizaciones locales.

Algunos ejemplos de bibliotecas con espacios de este tipo son la Biblioteca Pública de Nueva York que ha implementado espacios de coworking en varias de sus sucursales, como la Thomas Yoseloff Business Center at the Stavros Niarchos Foundation Library (SNFL) y la Mulberry Street Library que ofrecen una amplia gama de recursos gratuitos, incluyendo recursos electrónicos de primera calidad y servicios para empresas de todos los tamaños, desde empresas de nueva creación a empresas establecidas que buscan expansión, y para los solicitantes de empleo, desde el nivel básico al ejecutivo. El personal de la biblioteca ofrece asistencia y consultas. Los servicios de asesoramiento corren a cargo de empresarios con experiencia, planificadores financieros certificados y asesores financieros. Otra de las grandes bibliotecas que ofrece este servicio es la Biblioteca Central de Vancouver que cuenta con un espacio de coworking llamado «The Inspiration Lab«, que ofrece estudios de grabación, estaciones de edición de video, estaciones de diseño gráfico y áreas de trabajo compartidas para profesionales creativos. También la Biblioteca Municipal de Ámsterdam, conocida como OBA (Openbare Bibliotheek Amsterdam), ofrece espacios de coworking en varias de sus sucursales. Estos espacios están diseñados para profesionales independientes y emprendedores, y ofrecen áreas de trabajo compartidas, salas de reuniones y eventos de networking. a Biblioteca Central de Singapur cuenta con el espacio «library@orchard«, que incluye áreas de coworking para profesionales independientes y emprendedores. Además de las áreas de trabajo compartidas, el espacio también ofrece servicios de asesoramiento empresarial y talleres de desarrollo profesional. También la Biblioteca Estatal de Queensland ha implementado el espacio «The Edge«, que ofrece áreas de coworking, estudios de grabación, salas de reuniones y talleres de desarrollo profesional para emprendedores y profesionales creativos.

En conclusión, las bibliotecas están evolucionando para convertirse en espacios más dinámicos y multifuncionales al incluir servicios de coworking que proporcionan un entorno propicio para el trabajo colaborativo y el desarrollo profesional, de este modo las bibliotecas pueden desempeñar un papel crucial como tercer lugar en la comunidad.

Las bibliotecas como espacios de emprendimiento empresarial


Quinde-Cordero, Marlene. «Las bibliotecas como espacios de emprendimiento empresarial«. Desiderata, n. 24 (2024) pp. 98-105

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En la actualidad, las bibliotecas han evolucionado más allá de ser simplemente depósitos de libros y recursos informativos. Se han transformado en espacios dinámicos que desempeñan un papel crucial en el fomento del emprendimiento empresarial. Esta evolución refleja el reconocimiento de las bibliotecas como centros comunitarios versátiles y facilitadores del aprendizaje continuo. En este sentido, las bibliotecas, al ofrecer acceso a una amplia gama de recursos, tecnología y conocimientos, se han convertido en entornos propicios para el desarrollo de habilidades empresariales y la incubación de ideas innovadoras. Estos espacios no solo albergan colecciones de libros relacionados con el emprendimiento, sino que también brindan acceso a herramientas digitales, programas de capacitación y eventos que fomentan la creatividad y la iniciativa empresarial. Además, las bibliotecas actúan como puntos de encuentro para empresarios emergentes, proporcionando un entorno colaborativo donde pueden intercambiar ideas, establecer conexiones y recibir orientación de profesionales del sector. La integración de servicios de asesoramiento empresarial y la organización de eventos como charlas y talleres sobre emprendimiento contribuyen a fortalecer este papel de las bibliotecas como catalizadores del espíritu empresarial.

Cómo pueden colaborar las bibliotecas y los espacios de coworking en beneficio mutuo

Zilla. 2023. «How Libraries And Co-Working Spaces Can Collaborate For Mutual Benefits. Princh Library Blog».. 14 de diciembre de 2023. https://princh.com/blog-how-libraries-and-co-working-spaces-can-collaborate/.

La rápida evolución tecnológica y los cambiantes dinámicas laborales han llevado a las bibliotecas tradicionales y a los espacios de co-working a un punto de inflexión. El auge de los espacios de co-working ha transformado nuestra percepción de los entornos laborales, ofreciendo flexibilidad y comunidad a trabajadores remotos, emprendedores y freelancers. Mientras tanto, las bibliotecas, como instituciones de conocimiento, han lidiado con la adaptación a la era digital y la necesidad de seguir siendo relevantes para sus comunidades. La colaboración entre bibliotecas y espacios de co-working puede ofrecer beneficios mutuos, revitalizando los espacios de co-working con recursos y conocimientos, mientras que los espacios de co-working pueden infundir energía y modernidad a las bibliotecas. La colaboración va más allá de roles convencionales y se presenta como una fusión de conocimiento, comunidad y apoyo práctico, prometiendo ventajas que van más allá de la suma de sus partes.

La colaboración entre bibliotecas y espacios de co-working puede proporcionar a estos últimos acceso a una gran cantidad de recursos. Desde extensas bases de datos digitales hasta materiales de investigación y la integración de la educación en línea, las bibliotecas ofrecen un ecosistema de conocimiento que enriquece la experiencia de co-working. Además, las bibliotecas sirven como centros comunitarios, proporcionando a los espacios de co-working una audiencia incorporada y oportunidades para establecer contactos y promociones.

Las bibliotecas pueden aportar estabilidad y experiencia a los espacios de co-working, ayudando en la configuración y mantenimiento del espacio de trabajo, brindando orientación sobre ergonomía, diseño eficiente e incluso infraestructura de TI. Esta asociación va más allá de los roles convencionales de bibliotecas y espacios de co-working, fusionando conocimiento, comunidad y apoyo práctico para ofrecer una variedad de ventajas que van más allá de la suma de sus partes.

La transformación de las bibliotecas y los espacios de co-working en la era digital ha llevado a una reconfiguración de sus espacios físicos para acomodar el creciente movimiento de co-working. La integración de áreas de trabajo flexibles es fundamental, y las bibliotecas están adoptando el movimiento de makerspaces, que fomenta el aprendizaje práctico y proyectos creativos. Estos espacios proporcionan a los miembros de co-working lugar para la lluvia de ideas y prototipos, facilitando proyectos colaborativos y el desarrollo de habilidades. La naturaleza adaptable de los makerspaces permite a las bibliotecas atender diversos intereses e industrias dentro de la comunidad de co-working.

Además, las bibliotecas están renovando su mobiliario y distribución para crear espacios de trabajo cómodos y eficientes. Sillas ergonómicas, escritorios ajustables y áreas bien iluminadas se están convirtiendo en elementos básicos, asegurando que los miembros de co-working puedan ser productivos y mantener su bienestar físico. La dedicación de la mayoría de las bibliotecas a la sostenibilidad también se refleja en su diseño, con características respetuosas con el medio ambiente y acceso a espacios verdes.

La colaboración entre bibliotecas y espacios de co-working también puede aprovechar el poder de la tecnología y el intercambio de recursos para amplificar el impacto de su colaboración. Las bibliotecas ofrecen diversos recursos digitales, como bases de datos en línea, libros electrónicos y herramientas de investigación, que pueden enriquecer la base de conocimientos de los miembros de co-working, especialmente durante mudanzas de oficinas cuando el acceso a recursos físicos puede ser limitado. Además, las bibliotecas pueden proporcionar acceso a cursos y materiales de formación que mejoren las habilidades y competencias de los profesionales de co-working, ayudándoles a adaptarse a un entorno laboral en constante cambio.

En el otro lado de la colaboración, los espacios de co-working pueden contribuir compartiendo su infraestructura y experiencia tecnológica. Por ejemplo, pueden ser un recurso valioso durante mudanzas de oficina, mientras se empacan los equipos de oficina y cuando los profesionales necesitan un espacio de trabajo temporal. La conexión a internet de alta velocidad, las instalaciones de videoconferencia y el soporte avanzado de TI pueden ser recursos valiosos para las bibliotecas que buscan modernizar sus servicios y llegar a un público más amplio, especialmente cuando su espacio habitual está en proceso de cambios.

Ambas partes pueden explorar plataformas y bases de datos digitales compartidas, haciendo que la información sea más accesible y ampliando su alcance. Pueden ofrecer una experiencia integrada que mezcle de manera fluida el trabajo, el aprendizaje y la participación comunitaria al fusionar sus recursos tecnológicos.

La colaboración también puede ir más allá de los espacios físicos y los recursos, fomentando un sentido de comunidad y facilitando una participación significativa. Desde ofrecer un lugar perfecto para estudiar hasta organizar eventos de networking, esta colaboración enriquece la vida de las personas a las que sirven. Las bibliotecas, con su larga historia de participación comunitaria, pueden aportar su experiencia para beneficiar a los espacios de co-working. Pueden crear programas que atiendan a una variedad de intereses y necesidades dentro de la comunidad de co-working, desde talleres sobre emprendimiento y desarrollo de habilidades hasta eventos culturales y clubes de lectura.

Azoteas, cafés y salas Zoom: Las bibliotecas evolucionan al servicio de los trabajadores remotos

Taylor Telford «Rooftops, Cafes and Zoom Rooms: Libraries Evolve to Serve Remote Workers», Washington Post. 29 de junio de 2023. https://www.washingtonpost.com/technology/2023/06/29/libraries-remote-hybrid-work-offices-rto/.


Situadas en lugares céntricos y repletas de recursos, las bibliotecas se han convertido en uno de los espacios de co-working preferidos por los trabajadores del sector híbrido.

El espacio ideal de trabajo para William Gray es la sucursal principal de la biblioteca pública de Washington D.C. A veces, el emprendedor de 36 años revisa un libro de referencia sobre estrategia empresarial o diseño gráfico, pero en su mayoría está allí por el ambiente: las salas de reuniones privadas donde es lo suficientemente tranquilo para hacer una videollamada, la cafetería y la azotea, donde hay un ambiente social ambiental de otros profesionales trabajando en sus computadoras portátiles o llevando a cabo reuniones.

Gray describe la azotea de la biblioteca como si estuviera «en una hora feliz sin las bebidas», que se abrió al público en 2020 después de años de renovación.

Además de los expertos locales que pueden ayudarlo con las solicitudes de licencia para su negocio de bienestar o para presentar sus impuestos, Gray ve la biblioteca como un punto de encuentro de la comunidad. Le encanta cuando su jornada laboral coincide con eventos nocturnos, como la serie de conciertos de verano con músicos locales.

«Mucha gente no se da cuenta de que la biblioteca ya no es esta zona de silencio total, sin hablar», dice Gray. «Ahora es como un lugar de encuentro. Lo único que sigue igual es que todavía tienen libros».

Mucho antes de WeWork, las bibliotecas eran los espacios de coworking originales. Pero desde que comenzó la pandemia de coronavirus, las bibliotecas están evolucionando para servir mejor a los trabajadores remotos y híbridos, especialmente en las grandes áreas metropolitanas, según Brooks Rainwater, director ejecutivo y presidente del Consejo de Bibliotecas Urbanas.

Además de recursos como acceso gratuito a internet e impresoras, están desarrollando ofertas dirigidas a propietarios de pequeñas empresas y profesionales, renovando para incluir más espacios de trabajo privados y salas de reuniones. Sucursales en algunas ubicaciones, como Washington D.C. y la ciudad de Nueva York, han agregado cafeterías y convertido las azoteas en destinos elegantes donde los trabajadores pueden llevar a cabo reuniones o trabajar en un ambiente más relajado.

La llegada de nuevos clientes ha ayudado a las bibliotecas a recuperarse de la pandemia. En 2022, las visitas en persona a la mayoría de las bibliotecas públicas urbanas superaron el 50 por ciento de los niveles de 2019, un número que se espera que aumente aún más en 2023, según el Consejo de Bibliotecas Urbanas.

Mientras muchas empresas han utilizado oficinas amplias llenas de comodidades como herramientas de reclutamiento, muchas bibliotecas públicas ofrecen el beneficio de un entorno de trabajo elegante de forma gratuita. Por supuesto, algunos sistemas de bibliotecas públicas están mejor financiados y son más expansivos que otros. Algunas bibliotecas, especialmente en áreas rurales, están luchando. Pero las que han evolucionado están viendo un aumento en el uso, acercándose a los niveles previos a la pandemia.

Uno de los mayores desafíos de las bibliotecas, según Rainwater, es desmentir el estereotipo de que son lugares húmedos, estrictos y enfocados únicamente en los libros.

«Es una conversación constante para hacer saber a la gente que no es necesario que estén en silencio en la biblioteca, nadie los va a callar», dice Rainwater.

La evolución de las bibliotecas puede no ser para todos, ya que algunas personas pueden encontrar el ambiente animado como una distracción. Pero para muchos trabajadores remotos, las bibliotecas son un «tercer lugar» ideal, un término que los sociólogos utilizan para describir lugares que no son ni el trabajo ni el hogar y que son accesibles para grupos diversos de personas. En un momento en que las empresas están haciendo todo lo posible para que los trabajadores vuelvan a las oficinas, las bibliotecas se han convertido en una alternativa atractiva, que ofrece un límite entre el trabajo y el hogar, al tiempo que permite la socialización fortuita que los jefes dicen que se ha perdido a medida que los trabajadores pasan menos tiempo en las oficinas tradicionales.

«Estamos viendo a más profesionales jóvenes, personas que trabajan en sus propios negocios o de forma remota», dice Skye Patrick, directora de la biblioteca del condado de Los Ángeles, uno de los sistemas de bibliotecas públicas más grandes del país con más de 80 sucursales. «Mucha gente olvidó lo importante que es tener algún tipo de proximidad, una forma de socializar».

Las bibliotecas son «una de las entidades sociales más queridas y menos comprendidas» en Estados Unidos, según Patrick. En lugar de cultivar un ambiente austero, muchas están llenas de niños jugando y recibiendo ayuda con sus tareas escolares, además de adultos que llevan a cabo reuniones o trabajan en computadoras.

Si bien los estudiantes tienden a ser más conscientes de lo que las bibliotecas tienen para ofrecer, las personas tienden a alejarse de ellas a medida que envejecen, dice Patrick. Pero desde que las bibliotecas volvieron a abrir después de cerrar en los primeros días de la pandemia, ha habido una afluencia de personas que las descubren.

Las salas de estudio y conferencias de la Biblioteca del Condado de Los Ángeles, que antes se utilizaban por orden de llegada, se han vuelto tan populares que se reservan con mucha antelación, dice Patrick. También son cruciales para superar la «brecha digital» que quedó al descubierto con el cambio inmediato a la educación y el trabajo virtuales.

Más silenciosas que las cafeterías, las bibliotecas brindan un entorno óptimo para el trabajo concentrado que realiza Steve Sanders como director de tecnología de DonorSpring, una pequeña empresa de software. La empresa tiene un puñado de empleados y no tiene oficinas, por lo que Sanders rota entre diferentes bibliotecas cerca de su casa en Yorkville, Illinois.

Sanders tiene una oficina en casa, pero trabajar desde una biblioteca le permite estar rodeado de personas sin requerir interactuar mucho.

«Es fácil sentirse aislado trabajando de forma remota y no ver a las personas en persona», dice Sanders.

Para Annmarie Ekey, la biblioteca central de Washington D.C. ha sido el lugar perfecto para construir su negocio de consultoría de liderazgo. Está allí un par de veces a la semana, imprimiendo documentos, recogiendo material o llevando a cabo reuniones. Ha desarrollado relaciones con empleados en los

Las bibliotecas con makerspaces y terceros espacios están viendo cómo los índices de asistencia superan los de los años anteriores a la pandemia

«Tenemos un lema ‘el silencio ha abandonado el edificio’. Si el espacio está completamente silencioso, llegas a pensar ‘esto no está funcionando como yo quiero´’. Deseo que haya más conversación, más reuniones y más socialización’.

Gregor Smart, director de The Kirstein Business Library & Innovation Center (KBLIC) de la biblioteca pública de Boston

Callahan, Cloey. «Remote Workers Flock to Libraries for Resources, Collaboration». WorkLife (blog), 3 de mayo de 2023. https://www.worklife.news/spaces/remote-work-libraries/.

Las bibliotecas se vieron muy afectadas por los diversos cierres que se produjeron durante los años de apogeo de Covid-19. Pero ahora, gracias al auge del trabajo a distancia, están experimentando una ganancia inesperada.

«Ha surgido toda una nueva población de personas que ni siquiera conocían la biblioteca», afirma Gregor Smart, director de la Biblioteca Empresarial Kirstein y del Centro de Innovación de la Biblioteca Pública de Boston «Hay una nueva oleada de gente que viene a la biblioteca. Creo que se ha corrido la voz sobre nuestro centro de innovación. La gente se está dando cuenta de que es diferente». Los trabajadores a distancia acuden en masa a las bibliotecas en busca de recursos y colaboración

La Biblioteca Empresarial y Centro de Innovación Kirstein (KBLIC) invita a creadores de medios de comunicación, innovadores, solicitantes de empleo, empresarios, organizaciones sin ánimo de lucro, inversores, programadores y creadores a su nuevo espacio. Las personas con mentalidad empresarial pueden disfrutar de un espacio acogedor y moderno con más de 1.500 metros cuadrados de recursos impresos, asientos flexibles, tecnología innovadora para realizar investigaciones empresariales y zonas dedicadas para colaborar en proyectos con colegas o desarrollar una nueva habilidad profesional.

Y no se trata sólo de la Biblioteca Pública de Boston, otras bibliotecas de Estados Unidos están viendo cómo los índices de asistencia superan los de los años anteriores a la pandemia o, como mínimo, los igualan. Y esta afluencia de interés por utilizar las bibliotecas como tercer espacio de trabajo está poniendo en entredicho la antigua visión de las bibliotecas como espacios polvorientos cuyas atmósferas silenciosas estaban ferozmente custodiadas por severos bibliotecarios. En su lugar han surgido prósperos centros de colaboración para personas que desean conectar con otras, al tiempo que realizan un trabajo específico, con acceso a tecnología inteligente.

Por ejemplo, la biblioteca pública de Boston, de 5.000 metros cuadrados, refleja los espacios de coworking en muchos aspectos. Dispone de salas de conferencias que se pueden reservar para pequeñas reuniones, acceso a WiFi y acceso a expertos que pueden ayudar en cuestiones tecnológicas. Smart dice que se consideran un «espacio de coworking original».

El centro de innovación de la biblioteca se añadió durante su renovación de 2016 para crear un espacio maker con una impresora 3D y un laboratorio de innovación con una pantalla verde donde se puede reservar un tiempo para grabar podcasts, ordenadores de sobremesa Mac con photoshop y mucho más.

«En los últimos seis a nueve meses hemos reanudado realmente y el espacio está lleno», dijo Smart. «Se nota que la gente está en llamadas de negocios, en entrevistas de trabajo, en llamadas Zoom, en pequeñas reuniones. La gente viene a nuestro espacio».

Aunque el trabajo a distancia es cada vez más popular, puede resultar agobiante estar en casa todo el día. Muchos se han inclinado por las cafeterías u otros espacios de coworking para establecer contacto personal, pero la biblioteca tiene una ventaja sobre ambos: es gratuita.

Smart ha disfrutado personalmente viendo cómo los trabajadores remotos de la biblioteca tenían momentos casuales entre ellos, es decir, el efecto «water cooler». «Durante Covid no teníamos esas conversaciones ocasionales con gente diversa», dice Smart. «Al venir aquí, tienes esas oportunidades. Creo que es una verdadera ventaja, en comparación con estar en casa. He oído a gente que dice: ‘Puedo trabajar desde casa, pero me siento un poco solo'».

Lo que ocurre en la Biblioteca Pública de Boston refleja una tendencia nacional. The Urban Libraries Council, del que forman parte otras 170 bibliotecas, descubrió que la mayor parte de la programación de las bibliotecas tuvo que cambiar tras la pandemia. Al haber más gente que quiere pasar su jornada laboral en la biblioteca, las bibliotecas se han adaptado para construir sus espacios comunitarios, salas de reuniones y otros espacios reservables.

«Todo se reduce a que las bibliotecas dispongan de esas comodidades que buscan las personas que teletrabajan, como acceso a Internet, espacio físico fuera de sus casas», explica Elise Calanni, responsable de comunicación de The Urban Libraries Council. «Pero lo más importante es que las bibliotecas son el lugar más rentable para trabajar desde casa. Es una combinación perfecta de factores para que la gente empiece realmente a utilizar estas bibliotecas como centros comunitarios». Según Calani «Esta afluencia de personas que trabajan allí, anima al poder volver a ver cómo las bibliotecas vuelven a estar más animadas y como simplemente estar en el espacio da a la gente oportunidades de conectar con sus comunidades de muchas maneras diferentes». Y añadió «Las bibliotecas públicas siempre han tenido gran capacidad de adaptación a las necesidades de las comunidades. Lo ven como una gran oportunidad para introducir a más gente en el espacio».

Otro aspecto por el que los trabajadores a distancia acuden en masa a sus bibliotecas es porque estos establecimientos suelen ser el núcleo de sus comunidades. Claudia Strange, Directora de Relaciones Públicas y Marketing del Sistema de Bibliotecas del Condado de Fulton, afirma que la gente acude a las bibliotecas de Atlanta porque forman parte de su barrio. La red de bibliotecas públicas ha finalizado recientemente un proyecto de mejora de capital de 10 años de duración que ha incluido la creación de ocho nuevas bibliotecas, importantes ampliaciones en dos de ellas y la modernización de otras 24. Strange afirma que esto ha contribuido a crear un lugar más moderno y atractivo para los teletrabajadores.

Al igual que la Biblioteca Pública de Boston, Strange afirma que intentan alejarse de «las bibliotecas de antaño que son ‘hush hush'». «Ya no somos los espacios silenciosos de antes», dice Strange. «Parte de ello se debe a que acogemos actividades laborales». «Ahora disponemos de los recursos necesarios para albergar este tipo de actividad», afirma Strange. «En el caso de la biblioteca central, queríamos disponer de ese espacio y de toda una planta dedicada a esa posibilidad. Se puede entrar, colocar el ordenador, sentarse, trabajar y entrar y salir cuando sea necesario. Queríamos que fuera un lugar de trabajo a distancia».

Cómo crear un espacio coworking en tu biblioteca

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Hornby, Julie. «Coworking Space in Your Library — How to Start, Even on a Small Budget». Http://Demcointeriors.Com (blog), 30 de junio de 2021. https://www.demcointeriors.com/blog/coworking-space/.

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Una de las maneras de mejorar el atractivo de una biblioteca es posibilitar un espacio para iniciar y hacer crecer carreras y negocios, y de esa manera apoyar el emprendimiento, la cultura empresarial y la economía local. Un espacio coworking o una sala de reuniones bien equipada, demostrará que la biblioteca ofrece todo lo que necesitan los emprendedores y los trabajadores a distancia. Una biblioteca pública puede ser el lugar perfecto para quienes trabajan a distancia o quieren emprender un negocio y no tienen aún posibilidades de financiarse una oficina propia.

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Muchas bibliotecas han ampliado enormemente la gama de apoyo que ofrecen para el desarrollo de la mano de obra y de las pequeñas empresas, incluyendo espacios formales de coworking, eventos de creación de redes y programas para ayudar en el desarrollo de planes de negocio o estudios de mercado. A medida que las necesidades de nuestras comunidades cambian, también lo hacen los servicios y recursos disponibles a través de nuestras bibliotecas.

La pandemia obligó a millones de estadounidenses a trabajar a distancia. Aunque algunos trabajadores han acogido con satisfacción este cambio, no ha sido ideal para todos. Muchas personas carecen de espacio suficiente para crear una oficina en casa. Otros consideran que su entorno doméstico les distrae o aísla demasiado. Y otros tienen una tecnología poco fiable en casa, especialmente en comunidades sin servicio de Internet de banda ancha.

Aunque los espacios comerciales de coworking son cada vez más populares, no son para todo el mundo. Estos espacios suelen requerir un alquiler mensual o cuotas de socio, compromisos que no todos los trabajadores pueden asumir. Además, suelen estar en el centro de las ciudades y no en pueblos pequeños o suburbios.

Las bibliotecas públicas han sido llamadas «los espacios de coworking originales» por una razón: están idealmente posicionadas para ofrecer las comodidades que los trabajadores en línea necesitan para hacer su trabajo fuera de una oficina tradicional. De hecho, en 2017, más de un tercio de las bibliotecas estadounidenses ya ofrecían espacio para trabajadores móviles y espacios de coworking dedicados.

Muchas de las cosas que ha estado haciendo para mantener a sus usuarios seguros en su biblioteca durante la pandemia también se prestan perfectamente a un espacio de coworking flexible y socialmente distanciado. He aquí algunos consejos para empezar.

  1. Evalúa tu entorno

Si has estado digitalizando colecciones y reduciendo tu material de estantería en los últimos años, considera la posibilidad de dedicar parte de ese espacio al coworking. No tiene por qué ser enorme: incluso un espacio pequeño puede acoger a varios trabajadores en mesas comunes.

Busca un rincón tranquilo de la biblioteca, alejado de la sección infantil, del mostrador de circulación y de otras zonas bulliciosas. Ten en cuenta el flujo de tráfico en las inmediaciones y utiliza calcomanías en el suelo para animar a los usuarios a tomar caminos menos molestos.

  1. Amueblar el espacio

Algunos trabajadores remotos necesitan un lugar para abrir un portátil y concentrarse. Otros necesitan espacios de reunión para grupos y privacidad para llamadas telefónicas ocasionales mientras trabajan para hacer crecer un nuevo negocio.

Las mesas grandes que permiten a los usuarios trabajar solos o en pequeños grupos contribuyen a crear un ambiente contemporáneo y acogedor y proporcionan espacio para extenderse. Para mantener los dispositivos cargados, busca mesas con alimentación integrada u ofrezca una estación de carga multipuerto cerca.

Si un surtido de superficies de trabajo más pequeñas se adapta mejor a tu espacio, considera las que pueden configurarse en diferentes disposiciones en función de las necesidades de los usuarios. Utilize pantallas móviles o barreras independientes para ofrecer separación o privacidad a cada trabajador. Las pizarras blancas móviles pueden cumplir una doble función, como separadores y como lugar para que los grupos pequeños compartan notas y resuelvan problemas.

Si el espacio lo permite, añade espacios de colaboración informal con cómodos asientos.

  1. Mejora la tecnología

Un gran atractivo de las bibliotecas públicas es la disponibilidad de equipos voluminosos y caros para los que muchos trabajadores en línea no tienen dinero o espacio en casa. Los siguientes servicios facilitan el éxito de los usuarios en su espacio de coworking:

  • Impresión inalámbrica gratuita o barata (tanto en blanco y negro como en color)
  • Impresoras de gran formato
  • Impresoras 3D y equipos de construcción
  • Pizarras inteligentes
  • Ordenadores equipados con software de diseño como CAD o InDesign
  • Monitores de pantalla plana
  • Proyectores en las zonas de reunión

  1. Amplía la programación

Puede mejorar el atractivo de tu biblioteca como lugar para iniciar y hacer crecer carreras y negocios con programas sobre la redacción de currículos, la creación de un plan de negocios, la búsqueda de fuentes de financiación para pequeñas empresas, etc. Si los organizas en su espacio de coworking o en una sala de reuniones bien equipada, demostrará que su biblioteca ofrece todo lo que necesitan los trabajadores a distancia.

También puedes considerar la posibilidad de tener un horario abierto para que los usuarios busquen el asesoramiento de un bibliotecario de referencia centrado en temas empresariales. Algunas bibliotecas también ofrecen soporte informático sin cita previa para los dispositivos de los usuarios.

Independientemente de lo que nos depare el futuro, el trabajo flexible y los espacios de coworking que lo apoyan han llegado para quedarse. Incluso con una pequeña inversión en espacio y recursos, su biblioteca puede ser un destino deseable y fiable para los trabajadores en línea de la comunidad.

Aquí puedes encontrar algunas de las bibliotecas públicas que ofrecen espacios de coworking. En la mayoría de los casos no es necesario mostrar el carné de la biblioteca para utilizar el espacio de coworking. Si estás de viaje y quieres utilizar los recursos y servicios exclusivos para socios, muchas bibliotecas públicas ofrecen tarjetas de visitante gratuitas o de pago.

Columbia, SC: https://www.femmexcolumbia.com/

Washington, D.C.: https://www.youtube.com/watch?v=fgIdgP3-ilI

Mesa, AZ: http://mesathinkspot.tumblr.com/about

Goodyear, AZ: http://develop.goodyearaz.com/business-assistance/the-innovationhub-goodyearaz

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