Mis libros, mis asesinos.

LAS PALIZAS

Los libros que escribí saquearon mi cuerpo.
Me dieron puñetazos en la cara.
Muchos eligieron el cerebro.
Alguno se llevó el hígado, todos robaron.
Agotado, envejecido, deteriorado,
poco saludable, así me dejaron
las palabras bajo mi nombre.

El aparato digestivo, el sueño, los mareos,
la tráquea, las arritmias, el asma,
los huesos torcidos, la neumonía.

Mis poemas, mis novelas saquearon mi cuerpo.
Cada libro escrito era una paliza.
Daban fuerte.

Me dieron palizas de muerte,
tío, esos libros míos,
esos hijosdeputa
que finalmente no valieron la pena.

Mis libros no cambiaron el mundo,
solo me cambiaron a mí.
El glaucoma, la sed, el alcoholismo, l
as lumbalgias, las taquicardias,
el pánico, la bulimia, las palizas,
ellos saqueaban, se lo llevaban todo.

Mis libros,
mis asesinos.

Pero me gusta que me peguen.
Las palizas del amor.
Ponte una tirita en la ceja,
aún te queda un pulmón sano,
respira, pues, deja de beber,
y adelgaza.

Luis Vilas