Ciudadanos archiveros: programa de participación ciudadana en la preservación documental

Citizen Archivist

https://www.archives.gov/citizen-archivist/missions

Citizen Archivist es un programa voluntario dirigido por National Archives cuyo objetivo es involucrar a personas del público general en la clasificación, transcripción y etiquetado de documentos históricos

A través de este programa, cualquier persona con una cuenta puede acceder al catálogo digital de archivos, revisar imágenes y documentos escaneados y contribuir para hacerlos más accesibles: añadiendo “tags” (etiquetas), transcribiendo textos (especialmente manuscritos antiguos o documentos difíciles de leer) o comentando los hallazgos.

El propósito fundamental es —como dice NARA— “preservar, proteger y compartir los registros históricos” para promover la indagación pública y fortalecer la participación democrática.

Dentro del programa Citizen Archivist, las “Missions” son convocatorias temáticas específicas: conjuntos de documentos seleccionados que necesitan trabajo de transcripción o etiquetado.

  • Cada misión está centrada en un tema histórico concreto (guerra, inmigración, registros personales, sucesos, fotografía, etc.), lo que permite orientar los esfuerzos de quienes participan según intereses particulares.
  • Al hacer clic en una misión, el usuario es llevado directamente a los registros incluidos en ella, para comenzar a trabajar.
  • Las misiones se actualizan con regularidad: se añaden nuevas, otras terminan, y algunas permanecen disponibles para quienes las quieran revisar.

Las contribuciones de quienes participan como archivistas ciudadanos se agrupan en dos tareas principales:

  • Transcripción: consiste en reproducir en formato digital, legible y buscable el contenido de documentos originales como manuscritos, cartas, formularios o informes. Esta labor resulta fundamental cuando se trata de materiales antiguos, escritos a mano o con tipografías difíciles de interpretar. Gran parte de estos documentos —correspondencia, solicitudes, peticiones, expedientes o reportes oficiales— aguardan ser transcritos para que su información pueda consultarse de manera accesible por cualquier persona.
  • Etiquetado (“tagging”): implica añadir palabras clave o descriptores a imágenes, documentos y expedientes. Estas etiquetas permiten que el contenido pueda localizarse fácilmente mediante búsquedas y mejoran la organización del catálogo, facilitando la labor tanto de investigadores como del público general.

En algunos casos, la transcripción requiere un nivel de experiencia mayor —por ejemplo, cuando los documentos están muy dañados, presentan una caligrafía extremadamente difícil o contienen anotaciones casi ilegibles—. Para estas situaciones se crean misiones específicas denominadas “Transcriber Task Force”, en las que participan personas con mayor pericia en la lectura y transcripción de materiales complejos.