Buenas prácticas diseñadas para ayudar a las bibliotecas a prestar un mejor servicio a las personas sin hogar

LEADERSHIP BRIEF: Effective Strategies and Models for Urban Libraries Addressing Homelessness. Urban Libraries Council (ULC), 2024

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Urban Libraries Council (ULC), una organización sin fines de lucro que agrupa bibliotecas urbanas en América del Norte, ha lanzado un nuevo conjunto de mejores prácticas para ayudar a las bibliotecas a servir mejor a las personas que experimentan la falta de vivienda en sus comunidades. El informe, basado en las experiencias de líderes bibliotecarios de EE. UU. y Canadá, sugiere que las bibliotecas pueden apoyar tanto a los usuarios sin hogar como al personal mediante el desarrollo de asociaciones comunitarias, la capacitación del personal y el diseño intencional de espacios físicos.

Según Brooks Rainwater, presidente y CEO de ULC, las bibliotecas públicas están a la vanguardia en la atención de personas sin hogar, y al adoptar estas prácticas, pueden lograr un impacto duradero, asegurando que sean espacios seguros y de apoyo para todos.

Entre las bibliotecas miembros del ULC que destacan en el informe por sus estrategias efectivas se encuentran las bibliotecas públicas de Brooklyn, Calgary, Dallas, Denver, Los Ángeles, Salt Lake City, San Diego y Spokane, entre otras. Algunas de las recomendaciones incluyen:

  • Establecer asociaciones sólidas con agencias de servicios sociales y gobiernos locales para ampliar los recursos disponibles dentro de las bibliotecas, ofreciendo servicios esenciales como asistencia para la vivienda, atención de salud mental y formación laboral.
  • Preparar al personal bibliotecario mediante capacitaciones en técnicas de desescalada, atención informada por el trauma y manejo conductual. También se recomienda contratar personal especializado, como trabajadores sociales o coordinadores de participación comunitaria.
  • Diseñar entornos acogedores que promuevan un ambiente inclusivo y ofrecer áreas de apoyo designadas para que las personas sin hogar accedan fácilmente a los recursos.

Estas prácticas buscan reforzar el papel de las bibliotecas como refugios comunitarios seguros y accesibles para todos los usuarios.