
Stillman, Jessica. «Einstein’s Advice on How to Maximize Your Child’s Intelligence Is Totally Unexpected». Inc.com, 28 de agosto de 2024. https://www.inc.com/jessica-stillman/einstein-advice-how-maximize-child-intelligence-not-what-you-would-expect.html.
Está claro que Einstein no creía que la disciplina, la obediencia y las largas horas de estudio fueran la clave para desarrollar al máximo el potencial de una mente. ¿Qué recomendaba? La sorprendente respuesta es cuentos de hadas.
Albert Einstein, aunque fue uno de los genios más grandes de la historia, no tuvo éxito en el sistema educativo tradicional alemán. A pesar de que no tuvo malas calificaciones, su desagrado por la rutina y rigor escolar lo llevó a abandonar la escuela a los 15 años para educarse por sí mismo. Einstein creía que la disciplina estricta y la memorización no eran la clave para desarrollar todo el potencial intelectual.
En lugar de eso, Einstein recomendaba a los padres que leyeran más cuentos de hadas a sus hijos. En un artículo de 1958 de Montana Libraries, se relata que Einstein aconsejó que los cuentos de hadas eran cruciales para estimular la imaginación creativa, que es esencial para el desarrollo intelectual. Aunque la veracidad exacta de esta historia es incierta, coincide con otros comentarios de Einstein sobre la importancia de la exploración autodirigida y el disfrute en el aprendizaje.
El consejo de Einstein a los padres que quieren desarrollar el potencial intelectual de sus hijos nos llega a través de un artículo publicado en 1958 en Montana Libraries en el que la autora, una tal Rita McDonald, cuenta una historia que oyó sobre el gran físico. La Biblioteca del Congreso desenterró la antigua publicación para su blog. Dice así:
«En Denver oí una historia sobre una mujer que era amiga del difunto Dr. Einstein, sin duda reconocido como un destacado científico «puro». Ella quería que su hijo también fuera científico y le pidió al Dr. Einstein que le sugiriera el tipo de lecturas que podría hacer en la escuela para prepararse para esa carrera. Para su sorpresa, el Dr. Einstein recomendó «cuentos de hadas y más cuentos de hadas». La madre protestó por esta frivolidad y pidió una respuesta seria, pero el Dr. Einstein insistió, añadiendo que la imaginación creativa es el elemento esencial en el equipamiento intelectual del verdadero científico, y que los cuentos de hadas son el estímulo infantil de esta cualidad!»
Pero una cosa es segura: el consejo coincide con muchos otros comentarios de Einstein sobre el fomento del pensamiento libre, la inteligencia y la felicidad de los niños. También está respaldado por la ciencia moderna.
La ciencia moderna respalda esta recomendación, mostrando que los cuentos de hadas ayudan a los niños a desarrollar creatividad, pensar sobre conflictos y afrontar situaciones difíciles. Además, la lectura temprana está vinculada a un mejor rendimiento académico en el futuro, y los cuentos de hadas pueden ayudar a los niños a desarrollar empatía y pensamiento crítico.
Los cuentos de hadas, dicen los expertos modernos, son la forma perfecta de ayudar a los niños a pensar sobre el mundo, sus retos y sus esperanzas y miedos de la forma creativa e independiente recomendada por Einstein.
Las historias tradicionales de princesas pasivas y caballeros salvadores tienen sus inconvenientes. Pueden fomentar estereotipos sexistas y a menudo no representan todo el espectro de niños y sus experiencias. Pero hay muchas opciones más inclusivas y, según un resumen de PsychCentral de estudios recientes sobre sus beneficios, los cuentos de hadas ayudan a los niños a desarrollar su creatividad, a reflexionar sobre los conflictos y a afrontar situaciones difíciles.
Los cuentos de hadas también tienen otros beneficios. Los seres humanos somos criaturas que cuentan historias, y la neurociencia ha demostrado que, cuando leemos un cuento, nuestros cerebros imitan las situaciones de los personajes a los que seguimos; por ejemplo, un momento estresante de la historia provoca la liberación de hormonas del estrés en el cerebro. Tal vez por eso otros estudios demuestran que la literatura de calidad e incluso los programas de televisión ayudan a aumentar la empatía y la Inteligencia Emocional. No es descabellado pensar que los cuentos de hadas funcionan de forma similar para los niños.
Einstein probablemente tenía razón al decir que leer más cuentos de hadas a los niños podría maximizar su potencial intelectual, ayudándolos a desarrollar una mente creativa y empática. En otra carta a su propio hijo pequeño, que estudiaba piano, Einstein le aconsejaba: «Toca principalmente las cosas del piano que te agradan, aunque el profesor no te las asigne. Ésa es la forma de aprender más, cuando estás haciendo algo con tanto placer que no notas que pasa el tiempo».